Un niño puede ser considerado hijo sándwich si no logra hacerse un espacio propio como individuo diferente a sus hermanos. El hijo mediano puede llegar a sentirse desconcertado, ya que no va a gozar del protagonismo y la importancia que se le da al primogénito, ni de los aparentes mimos que piensa que reciben los más pequeños. En ocasiones, los medianos suelen ser los más olvidados de la familia, los que mayor sensación de vacío o de cuestionamiento del yo tienen, aunque paradójicamente, este olvido les puede estimular a “sacarse las castañas del fuego”.
¿Qué es el síndrome del hijo mediano o el hijo sándwich?
El síndrome del hijo mediano o hijo sándwich no es un trastorno de personalidad, ni siquiera una enfermedad como tal, sino más bien un rol que hace al hijo de en medio comportarse, y sentirse, de manera diferente al resto de sus hermanos. Esto suele ocurrir porque pueden sentir que no tiene la misma atención que su hermano mayor o menor (o menores), haciéndole creer que no es importante dentro de la familia, con el futuro daño a su autoestima.
De manera inconsciente, algunos de estos hijos sándwich, pueden pensar que no reciben el mismo cariño, ni tienen el mismo protagonismo del primogénito, ni serán tan consentidos o mimados como sí lo serían los pequeños. Lo que provoca que se sientan desplazados y sean más retraídos con su familia y en la sociedad.
Esta situación puede despertar en ellos, sentimientos de frustración, enfado, ira o desesperanza que se generan al sentir que hemos sido o somos el hijo/a menos atendido en relación con los otros hermanos.
¿Por qué se produce el síndrome del hijo sándwich?
En muchas familias, los hijos compiten entre ellos por la atención y los cuidados de los padres. Esto se intensifica cuando el apego es inconsistente, y es habitual que con el nacimiento del segundo hijo se produzca una reorganización familiar, por lo que el tiempo y los recursos, materiales e inmateriales, son cada vez más limitados y éstos hijos sienten que son menos atendidos o valorados por sus padres, en comparación con sus otros hermanos. Recordemos que el nacimiento del segundo hijo es el que suele crear un cisma en las relaciones de pareja.
Causas del síndrome del hijo mediano o hijo sándwich
Generalmente, se considera que es debido a la falta de tiempo de los padres por el cuidado de un mayor número de hijos/as. Inicialmente, entre los padres se reparten el tiempo a un solo hijo, pero con la llegada del segundo, son “dos para dos”, además del posible desgaste del primogénito, y el efecto de la novedad. El hijo mayor, el primogénito, ha obtenido más atención por parte de los padres y se le reconocen más sus logros y gestos. Cuando ya son 3 o más, y sobre todo si ha pasado un tiempo, los más pequeños necesitan más atención y cuidados, por lo que, el hermano del medio se siente menos atendido, e incluso desplazado, por los padres en comparación con sus hermanos. Esto, es una interpretación subjetiva del propio hijo sándwich.
Consecuencias pueden observar, en etapas infantojuveniles en estos niños, mayor número de conductas agresivas, estallidos de ira, conductas que son llamadas de atención, reproches, comparaciones constantes con los hermanos, ansiedad o depresión.
En la vida adulta, suelen proyectar una autoestima más baja, sentimientos de vacío y de inconsistencia del yo.
¿Qué hacer si nuestro hijo/a o nosotros mismos presentamos estos síntomas?
Si detectamos que alguno de nuestros hijos presenta más comportamientos agresivos con sus hermanos, que compite mucho con ellos por llamar nuestra atención, que se siente menospreciados o triste, o incluso si nos damos cuenta de que esto nos sucede a nosotros mismos, podría presentar este síndrome del hijo sándwich.
Si consideramos que esto es lo que puede sucederle a alguno de nuestros hijos, familiares o amigos cercanos o nos sucede a nosotros, lo recomendable es buscar ayuda psicológica donde nos faciliten herramientas para gestionar estas emociones.
6 consejos prácticos para familiares y amigos
- Estar atentos a los cambios de conducta repentinos de hijos e hijos de familiares o amigos.
- Escuchar lo que el menor nos verbaliza: en algunos casos, los niños nos indican abiertamente que le prestamos más atención a otros hermanos.
- Se deben validar sus sentimientos, evitando quitarle importancia o decirle cosas como: “eso no es verdad”, “te lo estás inventando”, “son tonterías tuyas”. Ellos se sienten de una forma determinada y hay que aceptarlo e intentar ayudar.
- Favorecer que se sienta querido y valorado por toda su familia.
- Intentar darle espacios individuales con ambos y cada uno de sus padres, destacando sus cualidades y destrezas. Pasar a veces un rato de calidad con cada uno de ellos por separado, puede ser suficiente.
- Estar atentos a las dinámicas relacionales que se dan entre los hermanos y poner límites claros cuando hay situaciones de abuso o maltrato, sin tener en cuenta el orden ni la jerarquía, pero si adaptándola a su edad.
Los hijos sándwich: ventajas y desventajas de ser los medianos
Un hijo es sándwich si no logra hacerse un espacio propio como individuo diferente a sus hermanos. El hijo mediano puede sentirse desconcertado, ya que no va a gozar del protagonismo y la importancia que se le da al primogénito, ni de los aparentes mimos que piensa que recibe el pequeño. En ocasiones, los medianos suelen ser los más olvidados de la familia, pero paradójicamente, este olvido les puede estimular a “sacarse las castañas del fuego“.
Ser papá o mamá de varios hijos es complicado, hay comportamientos o actitudes que pueden afectar a tus peques. No te desanimes, no existe el padre perfecto. Con paciencia, pautas y constancia podrás paliar esta sintomatología. Tu psicólogo especialista te puede ayudar a guiarte en este difícil proceso. Contacta con psicólogos Fuengirola hoy mismo.
Mario Olea, psicólogo especializado en terapias de tercera generación por la Universidad de Almería y sexólogo por la Universidad de Sevilla. Experto homologado en la aplicación de realidad virtual en psicología clínica para utilizada para tratamiento de fobias.
